Barcelona va a tener 161 nuevos cajeros que desplegará hasta finales de este año para asegurar la accesibilidad al dinero efectivo en todos y cada uno de los barrios de la urbe, sobre todo a la gente mayor, frente a la tendencia de cierre de cajeros y oficinas bancarias durante los últimos años.
El primer teniente de regidor de Barna, Jaume Collboni, ha explicado en conferencia de prensa este miércoles que este despliegue incluye una prueba piloto que el Municipio, a través de un acuerdo con el Banc Santander –el único que ha accedido al acuerdo, según él–, está llevando a cabo en 4 mercados de la ciudad: el del Besòs, Sants, La Llibertat y Sant Antoni.
Collboni ha destacado que esta iniciativa, que se va a hacer extensiva a más mercados si termina teniendo buenos resultados, presenta beneficios prácticos y de seguridad tanto para clientes para comerciantes, puesto que la mayoría de compras en los mercados se realizan en efectivo.
El Ayuntamiento también ha establecido un acuerdo con los quiosqueros, específicamente con la Associació de Professionals de Venedors de Premsa de la ciudad, y con la start-up Urban service Point, para que 125 quioscos instalen un cajero automático.
El asimismo titular de Economía del consistorio ha asegurado que no se ha destinado dinero público a estas acciones y ha lamentado que ciertas entidades querían cobrar al Municipio por poner cajeros y bancos: “Lo que no puede ser es que además pretendan hacer negocio con el dinero público”.
Preguntado por las compañías que instalan cajeros automáticos y que tienen convenios con las distintas entidades bancarias como son los de ATM, ha detallado que no van a pagar alquiler del espacio público como incentivo y que operan con comisiones de entre…