Ha sido un auténtico polvorín el que se ha vivido en el gobierno corporativo de Cellnex en los últimos 10 días, en los que el fondo TCI (The Children’s Investment Fund) se ha sublevado contra el consejo de administración. Tras alcanzar el nueve por cien de capital y transformarse en el primer accionista, TCI pidió cambios radicales en la gobernanza del conjunto. El más relevante es que consiguió el cese del presidente no ejecutivo, Bertrand Kan, quien fue sustituido por Anne Bouverot. Visite elEconomista ESG.
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