La banca europea se encuentra subida en una gran montaña rusa cuyas subidas y bajadas están basadas en los ánimos de los inversores. El ámbito cierra este viernes una semana convulsa tras el colapso de bancos en Estados Unidos y el tambaleo del histórico Credit Suisse, en pleno centro bancario del continente. Mientras Estados Unidos busca recomponer las piezas de su sistema bancario tras el terremoto del Silicon Valley Bank, la entidad helvética ha conseguido más tiempo este jueves con el respaldo millonario que solicitará al Banco Nacional Suizo.El ánimo en el mercado ha sido diferente al desplome generalizado del miércoles, aunque sin grandes celebraciones, ya que el Banco Central Europeo enfrió las expectativas de los últimos días de reducir las subidas de géneros de interés y anunció un nuevo aumento de medio punto, en línea con lo que había avanzado. Credit Suisse, la entidad más señalada estos días a este lado del Atlántico, rebotó de forma fuerte en Bolsa, aunque solo recobró parte de sus pérdidas de los últimos días.El Banco Nacional Suizo respaldó, a última hora del miércoles, la situación del cómputo del banco y le ofreció una línea de liquidez. La entidad le tomó la palabra y solicitó cincuenta y setecientos…
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