El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, viajó a la última cumbre del G-veinte celebrada en Bali con un extenso séquito compuesto por veintidos altos cargos y su esposa, Begoña Gómez, sin contar los escoltas de seguridad de cada uno de ellos de ellos ni los funcionarios de nivel técnico encargados de “hacer posible” el desplazamiento.
ambos llegaron vestidos con lonas de colores azul y amarillo que, según explicó la Presidencia del Gobierno, servía de homenaje a Ucrania tras 9 meses de guerra por la invasión de Rusia y sus bombardeos en todo el país.
Aunque la lista nominal de la delegación de España alcanza a…