Disney ha denunciado al gobernante de Florida, el ultraconservador Ron DeSantis por lo que llama una “campaña inexorable para emplear el poder del Gobierno como un arma”, conforme ha informado The Washington Artículo.
La demanda acusa al republicano de orquestar una campaña para castigar a la compañía por sus visiones políticas. La demanda llega solo una semana después de que DeSantis prometiese trabajar con el Congreso estatal para reducir el control y la autonomía de Disney sobre el parque temático.
El enfrentamiento entre las partes reventó cuando la compañía denunció públicamente la ley apodada ‘No digas gay’, que prohíbe instruir sobre orientación sexual e identidad de género en los institutos “de una manera no apropiada para la edad o el desarrollo” de los alumnos.
El parque temático Disney World tiene un estatus fiscal singular que le ha tolerado hasta ahora marchar prácticamente como un condado independiente. En dos mil veintidos, el Parlamento del estado permitió a DeSantis retirar el estatus singular de Disney, mas no ocurrió pues ello tendría consecuencias económicas negativas para los condados cercanos. En el mes de febrero del actual año, sin embargo, el Gobierno de DeSantis tomó el control de la junta de supervisión de la zona que hasta ahora había controlado la compañía.
En un inicio, la compañía no se pronunció sobre la ley ‘No afirmes gay’, mas la presión y protestas de sus empleados le forzaron a reaccionar, desatando la ira del gobernante ultraconservador. DeSantis se refirió a la compañía como “Woke Disney” –en referencia a un término usado de forma peyorativa para referirse a determinados campos de la izquierda–