El Banco Central Europeo (BCE) busca encajar su estrategia al nuevo panorama de turbulencias financieras. La presidenta de la autoridad monetaria, Christine Lagarde, ha advertido este miércoles de que rebajar la inflación hasta el objetivo del 2 por cien prosigue siendo “innegociable”, mas asimismo ha visado de que la inseguridad impone no atarse a una hoja de ruta. “Ni estamos comprometidos a subirlos más ni hemos terminado con las subidas de tipos”, ha sostenido Lagarde en una encuentro con analistas. Tras haber efectuado la mayor subida de su historia en nueve meses, la francesa ha detallado que su próximo movimiento va a depender de 3 variables: las previsiones del levanta de precios, la inflación latente y la transmisión de la política monetaria. O sea, que los consejeros valorarán la senda que prosigan los costos, pero asimismo que las restricciones de crédito no desestabilicen la situación financiera. Esto es, que ese proceso será “ordenado”.
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