El FBI investiga un “intento de asesinato” contra el expresidente de Estados Unidos Donald Trump, el segundo en solo dos meses. Esta vez, en su club de golf en West Palm Beach, en el Estado de Florida, donde un agente del Servicio Secreto vio asomar el cañón de un rifle AK-47 oculto entre los arbustos tras la valla de seguridad y abrió fuego. El candidato presidencial regresó a su residencia de Mar-a-Lago y se encuentra a salvo. Un sospechoso ha sido detenido e identificado en los medios como Ryan Routh, de 58 años. La policía ha localizado el arma de fuego y dos mochilas en los arbustos.
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