El Ministerio de Seguridad Social ha puesto en marcha un nuevo sistema a fin de que los autónomos coticen por sus ingresos reales comunicados a la Hacienda, una vez restados los gastos por desarrollar su actividad. Este nuevo mecanismo transitorio fue pactado con patronal, sindicatos y representantes de los autónomos. Cuando se anunció, el ministerio aseguró que el efecto en el conjunto era neutral para la recaudación de la Seguridad Social. Así lo certifican analistas como Fedea. Eso sí: los de ingresos bajos pagan menos y los de ingresos altos, más. Y seguirá así hasta el 1 de enero de 2026. Desde entonces, según ha comprometido el Gobierno con Bruselas, deberá haber un esencial incremento de los ingresos al igualar el tratamiento de las cotizaciones de los autónomos a las de los asalariados, algo que más adelante también elevará las prestaciones. Este sistema de contribución habría de estar absolutamente actual antes de 2032, como se recoge en la legislación.
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