Se cumplen un par de semanas desde que se desató la tormenta financiera. El pasado 10 de marzo, el banco regional estadounidense Silicon Valley Bank anunció una enorme ampliación de capital para intentar contener sus finanzas, tras reconocer que su cartera de activos había sufrido grandes pérdidas. Todo ello provocó una avalancha de ventas de sus acciones que obligó a suspender su cotización el pasado 10 de marzo y, finalmente, el Gobierno de California anunció a media sesión la liquidación del banco.
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