
El presidente chino, Xi Jinping, ha conseguido un tercer mandato sin precedentes como máximo dirigente del país, lo que le sitúa entre los líderes más influyentes que ha visto China desde la fundación del Partido Comunista Chino por Mao Zedong.
“China no puede desarrollarse sin el mundo, y el mundo también necesita a China.
Hemos creado dos milagros: el rápido desarrollo económico y la estabilidad social a largo plazo”, dijo.