Las autoridades de Memphis hicieron público el viernes un vídeo en el que se ve a Tyre Nichols siendo golpeado por agentes de policía que sujetaron al motorista negro y le golpearon repetidamente con los puños, las botas y las porras. (7 Ene)
La imagen del vídeo publicado el 27 de enero de 2023, por la ciudad de Memphis, muestra a Tyre Nichols durante un brutal ataque de cinco agentes de policía de Memphis el 7 de enero de 2023, en Memphis, Tennessee. Nichols murió el 10 de enero. Los cinco agentes han sido despedidos y acusados de asesinato en segundo grado y otros delitos. (Ciudad de Memphis vía AP)
MEMPHIS, Tennessee (Informa AP) – El país y la ciudad de Memphis se esforzaron el sábado por asimilar el video que muestra a la policía golpeando a Tyre Nichols, una grabación que dejó muchas preguntas sin respuesta sobre la parada de tráfico en la que se vio involucrado el automovilista negro y sobre otros agentes de la ley que se mantuvieron al margen mientras yacía inmóvil en el pavimento.
Los cinco agentes del Departamento de Policía de Memphis, también negros, han sido despedidos y acusados de asesinato en segundo grado y otros delitos por la muerte de Nichols tres días después de la detención. El vídeo difundido el viernes renovó las preguntas sobre cómo continúan los encuentros mortales con las fuerzas del orden incluso después de repetidos llamamientos a favor del cambio.
Una portavoz de la policía de Memphis declinó hacer comentarios sobre el papel desempeñado por otros agentes que se presentaron en el lugar de los hechos.
El director de la policía de Memphis, Cerelyn “CJ” Davis, ha dicho que se está investigando a otros agentes, y el sheriff del condado de Shelby, Floyd Bonner, dijo que dos agentes han sido relevados de sus funciones sin sueldo mientras se investiga su conducta.
Las ciudades de todo el país se habían preparado para manifestaciones, pero las protestas fueron dispersas y no violentas. En Memphis, varias docenas de manifestantes bloquearon el puente de la Interestatal 55 que lleva el tráfico sobre el río Mississippi hacia Arkansas. Los semirremolques quedaron retenidos a cierta distancia.
Los manifestantes bloquearon en ocasiones el tráfico mientras coreaban consignas y marchaban por las calles de Nueva York, Los Ángeles y Portland (Oregón). En Washington, los manifestantes se reunieron frente a la Casa Blanca y cerca de la plaza Black Lives Matter.
Memphis permaneció en vilo. Antes de las protestas, algunos negocios del centro de Memphis tapiaron las ventanas y el sistema escolar canceló las actividades extraescolares. Las escuelas del condado de Memphis-Shelby, que cuentan con unos 100.000 estudiantes, pospusieron el sábado las actividades deportivas y extraescolares.
Christopher Taylor se encontraba entre los manifestantes en el puente de la Interestatal 55. El nativo de Memphis dijo que los agentes parecían reírse mientras permanecían de pie después de la paliza.
“Lloré”, dijo. “Y que allí mismo, no sólo como padre que soy, sino también como hijo, mi madre aún vive, ese podría haber sido yo.”
Blake Ballin, el abogado del agente despedido Desmond Mills, dijo a The Associated Press en un comunicado el sábado que los vídeos “han producido tantas preguntas como respuestas.” La pregunta de si la ciudad se mantendría en paz “ha sido respondida”, dijo.
Algunas de las otras preguntas se centrarán en lo que Mills “sabía y lo que pudo ver cuando llegó tarde a la escena” y si sus acciones “cruzaron las líneas que fueron cruzadas por otros oficiales durante este incidente”, dijo Ballin.
La detención fue llevada a cabo por la llamada unidad Scorpion, que cuenta con tres equipos de unos 30 agentes de calle que persiguen a delincuentes violentos en zonas acosadas por la alta criminalidad, dijo Davis.
En una entrevista con la AP el viernes, dijo que no cerraría una unidad si unos pocos agentes cometen “algún acto atroz” y porque necesita que esa unidad siga funcionando.
“Toda la idea de que la unidad Scorpion es una mala unidad, simplemente tengo un problema con eso”, dijo.
Unas horas más tarde, el alcalde de Memphis, Jim Strickland, dijo que la unidad ha estado inactiva desde el arresto del 7 de enero.
“Está claro que estos oficiales violaron las políticas y el entrenamiento del departamento”, dijo.
La ciudad estaba “iniciando una revisión externa e independiente de la formación, las políticas y las operaciones de nuestras unidades especializadas”, dijo Strickland en un comunicado.
Davis reconoció que el departamento de policía tiene una escasez de supervisores y dijo que los funcionarios de la ciudad se han comprometido a proporcionar más de ellos.
“La falta de supervisión en este incidente fue un problema importante”, dijo Davis. “Cuando los agentes están trabajando, deberías tener al menos un supervisor por cada grupo o escuadrón de personas. No sólo alguien que esté en la oficina haciendo el papeleo, alguien que esté realmente integrado en esa unidad”.
La grabación muestra a la policía golpeando salvajemente a Nichols, un trabajador de FedEx de 29 años, durante tres minutos, mientras le gritan blasfemias durante todo el ataque. El equipo legal de la familia Nichols ha comparado la agresión con la infame paliza que la policía propinó en 1991 al motorista de Los Ángeles Rodney King.
En el vídeo se puede ver a los agentes sujetando a Nichols y golpeándole repetidamente con los puños, las botas y las porras mientras el motorista negro gritaba llamando a su madre.
El vídeo está lleno de momentos violentos en los que se ve a los agentes persiguiendo a Nichols y dejándolo en el suelo apoyado contra un coche patrulla mientras se chocan los puños y celebran sus acciones.
Después de que el primer agente sacara bruscamente a Nichols de un coche, se oye a Nichols decir: “Yo no he hecho nada”, mientras un grupo de agentes empieza a forcejear con él para tirarlo al suelo.
Se oye a un agente gritar: “¡Dispárenle!
Nichols dice tranquilamente: “De acuerdo, estoy en el suelo.”
“Chicos, estáis haciendo mucho ahora mismo”, dice Nichols. “
“¡Parad, no estoy haciendo nada!”, grita momentos después.
Entonces se puede ver a Nichols corriendo mientras un agente le dispara una pistola eléctrica. Los agentes empiezan a perseguir a Nichols.
Se llama a otros agentes y se produce una búsqueda antes de que Nichols sea atrapado en otra intersección. Los agentes le golpean con una porra y le propinan patadas y puñetazos.
Las imágenes de las cámaras de seguridad muestran a tres agentes rodeando a Nichols mientras yace en la calle acorralado entre coches de policía, con un cuarto agente cerca.
Dos agentes sujetan a Nichols contra el suelo mientras se mueve y, a continuación, el tercero parece propinarle una patada en la cabeza. Nichols se desploma más completamente sobre el pavimento con los tres agentes rodeándole. El mismo agente le da otra patada.
El cuarto agente se acerca, saca una porra y la sostiene a la altura del hombro mientras dos agentes mantienen a Nichols en posición vertical, como si estuviera sentado.
“Te voy a dar una paliza”, se oye decir a uno de los agentes. Su cámara corporal le muestra levantando la porra mientras al menos otro agente sujeta a Nichols. El agente golpea a Nichols en la espalda con la porra tres veces seguidas.
Los otros agentes parecen levantar a Nichols para que se ponga en pie, pero éste se tambalea como un muñeco, apenas capaz de mantenerse en pie.
Un agente le da un puñetazo en la cara, mientras el agente de la porra sigue amenazándole. Nichols tropieza y se da la vuelta, todavía sostenido por dos agentes. El agente que le dio el puñetazo se acerca a Nichols por delante y le da cuatro puñetazos más. Entonces Nichols se desploma.
Después se puede ver a dos agentes encima de Nichols en el suelo, con un tercero cerca, durante unos 40 segundos. Otros tres agentes se acercan corriendo y se ve a uno de ellos pateando a Nichols en el suelo.
Mientras Nichols se desploma contra un coche, ninguno de los agentes le presta ayuda. Las grabaciones de las cámaras corporales muestran en primera persona a uno de ellos agachándose y atándole el zapato.
Tardan más de 20 minutos después de que Nichols sea golpeado y esté en el suelo antes de que se le proporcione algún tipo de atención médica, a pesar de que dos bomberos llegaron al lugar con equipo médico en menos de 10 minutos.
A lo largo de los vídeos, los agentes hacen afirmaciones sobre el comportamiento de Nichols que no están respaldadas por las imágenes o que el fiscal del distrito y otros funcionarios han dicho que no sucedieron. En uno de los vídeos, un agente afirma que durante el primer control de tráfico Nichols buscó el arma del agente antes de huir y casi puso la mano en la empuñadura, lo que no se muestra en el vídeo.
Después de que Nichols estuviera esposado y apoyado contra un coche de policía, varios agentes dicen que debía de estar drogado. Más tarde, un oficial dice que no se encontraron drogas en su coche, y otro oficial responde inmediatamente que Nichols debe haber tirado algo mientras huía.
Las autoridades no han publicado un informe de la autopsia, pero han dicho que no parecía haber justificación para la parada de tráfico, y no se encontró nada de importancia en el coche.
Los registros judiciales mostraron que los cinco ex oficiales – Tadarrius Bean, Demetrius Haley, Desmond Mills Jr, Los agentes se enfrentan a cargos de asesinato en segundo grado, agresión con agravantes, secuestro con agravantes, mala conducta oficial y opresión oficial. Cuatro de los cinco agentes habían pagado una fianza y habían sido puestos en libertad el viernes por la mañana, según los registros del tribunal y de la cárcel.
El asesinato en segundo grado se castiga con penas de entre 15 y 60 años de prisión según la ley de Tennessee.
Los periodistas de Associated Press Aaron Morrison en Nueva York, Travis Loller en Nashville, Tennessee, y Rebecca Reynolds en Lexington, Kentucky, contribuyeron a este reportaje.
