El turismo afianzó su restauración el año pasado, con una actividad similar a la que se registraba antes de que la pandemia lo sumiera en su peor crisis, mas aún por debajo del nivel de 2019, año récord en llegadas desde el extranjero. Un total de 67,43 millones de visitantes llegaron a España hasta noviembre pasado, un ochenta y cinco por ciento de los recibidos en los 11 primeros meses de hace tres años (setenta y nueve con veinte millones), según el INE (INE). La mejora se genera a pesar del impacto que ha tenido la subida de los costos en el poder adquisitivo de los visitantes y que se aprecia en su gasto medio: este alcanzó en noviembre los mil doscientos cuarenta y uno euros, un 18 por cien sobre el registrado en dos mil diecinueve (1.055 euros), pese a que la duración del viaje se redujo de los 8,5 días de hace tres años a los 7,5 actuales.
Seguir leyendo
