Europa se prepara para apretarse el cinturón. En los últimos años, el gasto público se ha transformado en la red de seguridad que amortiguó la caída y evitó un cataclismo de dimensiones mayores por la pandemia y la invasión rusa de Ucrania. Mas los Estados ya han empezado a cerrar el grifo. El déficit en el primer trimestre del año en la zona euro fue del 3,2 por cien . Y la tendencia seguirá si los países cumplen con el compromiso que asumieron sus ministros de Finanzas en el último Eurogrupo: “Lograremos la necesaria orientación fiscal restrictiva global en la zona del euro para 2024″. Esta semana el FMI (FM) ha llamado a continuar ese camino.
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