De pequeño siempre y en toda circunstancia quise ser Danny Amatulo, el más inservible de todos y cada uno de los protagonistas de Fama , el que estaba más cerca del desafino y al que nunca se le vio danzar en ninguno de los episodios de la serie. Amatulo era el más blanco fantasmagórico de todos los estudiantes de la escuela de artes escénicas de la ciudad de Nueva York, dominado por jóvenes negros, y pretendía ser como pues era el europeo que se abría camino en Nueva York pese a sus deficiencias. Triunfar en Nueva York como Amatulo, un simpático inútil pero que vivía su juventud en Broadway, donde los estudiantes de la escuela bailaban la escena inicial de la serie, colapsando la calle 46, y donde se escuchaba a Irene Cara cantando: “Fame, I wanna live forever, I’m gonna learn how to fly high”.
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