A un par de días de su debate de investidura, para la que no ha reunido los apoyos precisos, Alberto Núñez Feijóo ha festejado este domingo su primer acto tumultuario como líder de la oposición: contra un Gobierno que no se ha constituido aún ―el actual está en funciones desde el veintitres de julio― y contra una medida, la amnistía, que tampoco se ha aprobado. Ha sido un mitin masivo. El PP tocó a refuto, trajo a todos sus barones territoriales a la villa de Madrid y fletó decenas y decenas de autobuses desde todos y cada uno de los puntos de España para completar la plaza de Felipe II, que realmente es la avenida Felipe II que conduce hasta la plaza del pintor surrealista Salvador Dalí. Según el PP, han acudido más de 45.000 personas. Conforme la delegación del Gobierno, cuarenta.
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