¡Buenos días!
Llega el día D para Ferrovial: D de desplante, de desaire, de injurio, de desfalco, de desprecio, de desdén a los ciudadanos españoles… Este jueves se vota en la junta de accionistas la resolución de trasladar la sede de la compañía de España a Holanda. En esta información hemos preparado una guía para no perderse en esta asamblea de accionistas que decidirá la deslocalización. Todo indica que la votación va a salir en favor del cambio de sede tras la rectificación del fondo soberano noruego.
La decisión de Ferrovial no es una cuestión de libertad o de construcción europea como trata de esgrimir la derecha para desgastar al Gobierno de alianza. La marcha de la compañía de la familia Del Pino refleja cómo las grandes fortunas imponen sus decisiones sobre la ciudadanía y las instituciones públicas, es la imagen de los más ricos disponiendo del planeta para manejar sus negocios sin tomar en consideración más que su voluminosa cartera, en suma, estamos ante un símbolo más de de qué forma el capital construye el planeta a su medida.
En elDiario.es durante estas semanas hemos recordado de qué manera se fraguó la fortuna de los primordiales propietarios, la familia Del Pino, en la dictadura, que se sostuvo en la democracia gracias a la obra pública; te hemos contado que Ferrovial manipuló a lo largo de décadas licitaciones públicas de cientos y cientos de millones en España a la vez que fichaban a excargos de Competencia, y los abundantes casos de corrupción de esta constructora, tanto en España como en el extranjero. Asimismo hemos hecho un repaso sobre de qué forma Ferrovial duplicó sus pagos a lobbies mientras preparaba su mudanza a Países Bajos, cómo sus consejeros incumplían las indicaciones de buen gobierno o de qué forma un tribunal tumbó el plan “premeditado” de los Del Pino para evitar impuestos…
