La Hacienda ha descubierto que el portavoz parlamentario de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, y su esposa, Rocío Monasterio, aspirante por el partido a la Presidencia de la Comunidad de la villa de Madrid, declararon un trabajo “simulado” para defraudar a la Hacienda pública. La inspección fiscal ha concluido que el estudio de arquitectura de Monasterio no realizó tarea de consultoría alguna para la operación de venta de un edificio de mucho lujo en Madrid de la que se ocupó Espinosa de los Monteros. A pesar de ello, el estudio de Monasterio emitió una “factura falsa” por ciento sesenta y nueve.400 euros, IVA incluido.
Los hechos están relacionados con la venta de un edificio en Madrid, en el número tres de la calle General Castaños, en el elitista barrio de Justicia en pleno centro de la capital. La construcción era propiedad de familiares de Iván Espinosa de los Monteros, quienes recurrieron a la experiencia de este en la intermediación inmobiliaria para proceder a su venta.
El portavoz parlamentario de Vox contrató aparentemente al despacho de arquitectos de su esposa para que realizara una investigación sobre las posibilidades del edificio. Pese a facturarlo e incluirlo en sus declaraciones y las de sus sociedades, el trabajo de Rocío Monasterio y Asociados (RMA) fue “una simulación”, esto es, jamás se efectuó, conforme ha comprobado la Agencia Tributaria.
Las conclusiones de la Hacienda fueron confirmadas por el Tribunal Económico-Administrativo Regional de Madrid, un organismo dependiente del Ministerio de Hacienda. Dichas liquidaciones fueron consecuencia de cinco actas de inspección efectuadas a Iván Espinosa de los Monteros, dos de sus sociedades y a la firma de arquitectos de Rocío Monasterio. elDiario.es se ha puesto en contacto con el “responsable nacional de prensa de Vox” para…