Cuando al economista Juan González le preguntan por la filosofía de Herrero Brigantina, el conglomerado financiero que creó en 2011, recurre a la expresión “certeza en la duda”. Bajo los focos de convenciones empresariales, flanqueado por encorbatados directivos y la pirotecnia verbal de especialistas en coaching, González se refiere así al cóctel de valentía y arrojo que debe guiar al buen ejecutivo. Una hoja de ruta que este asturiano de cuarenta y cuatro años ha seguido para levantar un tinglado societario que afirma haber seducido a treinta y cinco clientes del servicio en Europa con sus soluciones de inversión, planes de pensiones, seguros, hipotecas y préstamos. Desde Ponferrada (León), el directivo asegura conducir una red de una treintena de oficinas en España que extiende sus tentáculos a través de sucursales en la ciudad de Londres, Miami, París, Ámsterdam y Hong Kong. Con una cartera de clientes del servicio integrada por pymes, autónomos y familias, la firma desembarcará este año en Bolsa, según anunció en el mes de enero en una convención en Valencia.
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