Las turbulencias financieras y la huida del inversor de los mercados han reducido en una décima parte el patrimonio gestionado por los bancos españoles, fundamentalmente en fondos de inversión y planes de pensiones, a lo largo de los tres primeros trimestres del año. Las nueve mayores entidades -donde se incluyen las seis cotizadas más Ibercaja, Kutxabank y Abanca- contaban a cierre de septiembre con unos recursos de los clientes fuera de balance por un valor de cerca de cuatrocientos sesenta y tres mil millones de euros, lo que supone una caída del 10 por ciento con respecto al cierre de 2021 y esto implica también que la gestión patrimonial haya perdido algo de peso respecto al resto de sus activos.
in Actualidad