La economía global lleva años instalada en la “policrisis” que en su día acuñó Jean-Claude Juncker, expresidente de la Comisión Europea. La guerra entre Israel y Gaza ha sacudido las asambleas del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, que se celebran esta semana en Marraquech, al avivar las dudas sobre la marcha de una débil economía global. El organismo que dirige Kristalina Georgieva dice estar vigilando de cerca la evolución del enfrentamiento frente al temor de que suponga un repunte de la inflación si se entorpece la producción y distribución de petróleo. La secretaria del Tesoro de EE UU, Janet Yellen, aseveró este miércoles en una rueda de prensa en Marruecos que por el momento el impacto de esa crisis es limitado. “Todavía veo como escenario base el llamado aterrizaje suave”, dijo Yellen a preguntas de los periodistas, aunque admitió: “La situación en Israel plantea preocupaciones adicionales”.
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