El FMI (Fondo Monetario Internacional) ha estudiado las crisis de inflación similares a la presente desde mil novecientos sesenta y ha concluido que solo “una pequeña minoría fueron seguidas por una aceleración sostenida de los sueldos y los costes”. Entre los casos analizados se hallan los periodos de inflación que se iniciaron en mil novecientos ochenta y nueve y en el dos mil en España, el que padeció Alemania tras la caída del Muro de Berlín o el que se dio en U.S.A. en los ochenta por la escasez de petróleo.
Al estudiar episodios de las últimas década con patrones de caída de los sueldos reales, los economistas del organismo multilateral ven “que un incremento de los salarios nominales [en línea o bajo la inflación como ocurre ahora en nuestro y en la eurozona] no debe verse necesariamente como una señal de que se está consolidando una espiral de salarios y precios”.
En cambio, cada mes, en todos y cada valoración de los datos de IPC (Índices de precios de consumo) desde el instante en que se exacerbó la crisis…