La percepción de la ciudadanía sobre el funcionamiento de la sanidad pública está empeorando de forma preocupante, según se desprende de la encuesta de 40dB. que publican hoy EL PAÍS y la Cadena SER. Que el 39,1 por cien de la población española considere que funciona “regular” y el 26,8 por cien “mal o muy mal” señala un grado de insatisfacción inaceptable en un servicio público tan esencial. Solo una tercera parte de los encuestados (treinta y dos con siete por ciento ) considera que la sanidad pública funciona bien o realmente bien, lo que indica que la mayoría de la población tiene una experiencia reciente o negativa o no suficientemente satisfactoria. Preguntados específicamente por esta experiencia, resulta llamativo que aquello que recibe una valoración positiva más generalizada es el buen estado de las instalaciones (setenta y cuatro con siete por ciento ) al tiempo que cuestiones claramente relacionadas con la calidad asistencial, como la celeridad o la presencialidad, solo ha sido satisfactoria para el sesenta y seis con nueve por ciento y el sesenta y uno con seis por ciento de los encuestados, respectivamente. Entre 3 y 4 de cada diez usuarios han debido esperar más de lo deseado o no han podido tener atención presencial.
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