
La tormenta Elliot ha sumido bajo un manto de frío extremo, nieve y hielo a buena parte de Estados Unidos en plenas fiestas navideñas, las más gélidas registradas en el país desde hace décadas. El temporal, provocado por un frente de aire ártico, ha comenzado a amainar este domingo tras dejar un balance de al menos una veintena de víctimas mortales.