A pesar de los intentos del gobierno chino de acabar con las manifestaciones en contra de la política Cero Covid, los ciudadanos siguen saliendo a la calle para denunciar la situación y censura que viven. Para frenar estas protestas, la policía está revisando los smartphones de los manifestantes para ver si tienen apps extranjeras como Instagram, Twitter o Telegram, desde las cuales se está movilizando la sociedad.