Argentina entera está volcada con su selección, tras su épica victoria en el Mundial de Futbol celebrado en Qatar. El equipo dirigido por Leo Messi ha levantado el ánimo de un país alicaído por una crisis económica de la que no se ve el fin. El presidente, Alberto Fernández, que no estaba en el estadio Lusai de Doha, ha convidado a los futbolistas a celebrar el triunfo en la Casa Rosada, la sede de gobierno. Pero la selección se resiste a brindar este instante de gloria a Alberto Fernández, poco a poco más impopular. Poco antes que los futbolistas de la Albiceleste llegan al aeropuerto de Ezeiza el gobierno ha decretado el martes como jornada festiva.
La celebración quieren hacerla los albicelestes en el Obelisco, con los llenes, conforme han dicho en un tweet. Van a recorrer parte de la provincia y la ciudad de la ciudad de Buenos Aires. Messi, que ha conseguido su primera Copa del Mundo en Qatar, repitió antes de salir hacia Argentina que deseaba compartir la victoria con sus compatriotas. El presidente Alberto Fernández los elogió en un…