Desde el 18 de abril, la bandera de Palestina ondea de este a oeste en diferentes universidades de EE UU. La movilización estudiantil en solidaridad con Gaza, que se ha saldado hasta el momento con un millar de detenidos en más de 25 campus de al menos 21 Estados, se está haciendo un hueco en los libros de historia junto a las masivas protestas contra la guerra de Vietnam, a finales de los sesenta. El desalojo policial de dos acampadas (entre ellas la de Columbia) y un encierro en dos campus de Nueva York, en la noche del martes, con un total de 300 detenciones, no parece haber disuadido a los manifestantes; tampoco la amenaza de suspensión académica e incluso de expulsión para quienes participen en las concentraciones. Al contrario, los ánimos de estudiantes y activistas enfrentados entre sí y con las fuerzas del orden parecen cada vez más crispados, como demuestran las escenas de violencia vividas durante esta madrugada en el campus de la Universidad de California (UCLA) en Los Ángeles.
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