Luis Rubiales ha dimitido la noche de este domingo como presidente de la Real Federación De España de Fútbol (RFEF), de cuyas funciones le había suspendido la FIFA tras el beso no consentido a Jenni Precioso a lo largo de las celebraciones del Mundial de futbol ganado por la selección de España femenina en Australia el pasado veinte de agosto. Rubiales publicó a las 21.54 un comunicado en X (ya antes Twitter) en el que contaba que a las veintiuno y treinta le había transmitido al actual presidente en funciones Pedro Rocha su “renuncia al cargo de presidente de la RFEF”, decía. “También le he informado de que he hecho lo mismo con mi cargo en UEFA a fin de que mi puesto en la vicepresidencia pueda ser sustituido”.
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