“Marcial, Marcial es el más listo”. Esta oración se llegó a transformar en prácticamente un lugar común en la ría de Arousa al comprobar la trayectoria de los más insignes narcotraficantes gallegos. Destacaba las habilidades de Marcial Dorado Baúlde (Cambados, mil novecientos cincuenta) para dirigir sus múltiples negocios ilegales, dirigir su patrimonio, tender puentes en todas y cada una de las esferas y ser lo más prudente posible con la descomunal fortuna que amontonó, al desplazar en los años noventa casi 70 millones de euros, según la justicia. “Marcial da Illa” (Marcial de la Isla) terminó, no obstante, como el más conocido de sus compinches, más aun que quiso ser el émulo gallego de Pablo Escobar, Sito Miñanco. La fama se la dio su amistad de varios años, de mediados de los 90, con Alberto Núñez Feijóo, aspirante del PP a la presidencia del Gobierno.
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