En emisión desde 2006, El Hormiguero se ha convertido en una parada imprescindible para cualquier celebridad internacional que se pase por España, mas asimismo para políticos, escritores, divulgadores o influencers.
Las apariciones de algunos de ellos acostumbran a ser cuestionadas en redes por el tinte conservador del programa, algo que ocurrió hace pocas semanas con Rosalía, que se hizo pasar por camarera en un cómico vídeo para el programa, al igual que en su interior aparición emuló ser cronista.
Con todo, la mayor parte de invitados sigue acudiendo pese a las diferencias ideológicas que puedan tener por las grandes audiencias que cosecha, siendo varios de sus programas las emisiones más vistas de todos los años, según recoge Barlovento Comunicación en sus informes.
Sin embargo, alguien aboga por salirse de este patrón que semeja inamovible. Se trata de la actriz Mónica López. En una entrevista durante la promoción de Rapa, exitosa ficción de Movistar + cuya segunda temporada acaba de ver la luz; la intérprete declaró que no había que asistir al programa porque «blanquea el fascismo».