La estructura ejecutiva de Naturgy está cerca de parar de ser una anomalía para los estándares de las grandes cotizadas españolas y de los códigos de buen gobierno corporativo. La segunda energética de España remata el nombramiento de un consejero delegado que acepte una parte de las funciones ejecutivas del presente presidente, Francisco Reynés, sin que este pierda —ni mucho menos— su poder de decisión tanto en lo estratégico como en el día a día. El consejo de administración de la compañía va a tratar la cuestión en su reunión mensual ordinaria de la semana próxima, tal como adelantó el primer día de la semana 5 Días.
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