Varias de las jugadoras de la selección española de futbol que el pasado viernes emitieron un comunicado demandando cambios profundos en la Federación De España de Fútbol (RFEF) después del caso Rubiales y el beso no consentido a Jenni Bello han querido dejar en claro que su postura no ha alterado. Y que no volverán a vestir la camiseta de La Roja hasta el momento en que no observen una reforma de las estructuras de la federación que, según ellas, no les permite trabajar en unas condiciones convenientes ni las respeta como mujeres y futbolistas. Así lo han expresado cuando menos 15 de las 23 futbolistas incluidas en la lista que ha ofrecido la seleccionadora Montse Tomé a las 16.30 de la tarde del lunes.
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