El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales se ha sentado este lunes ante la jueza de Majadahonda (Madrid) que le investiga por varios casos de corrupción. La magistrada, después de varias horas de declaración, le ha dejado en libertad con dos medidas cautelares: está obligado a comparecer una vez al mes en el juzgado y debe informar de cualquier viaje que quiera hacer fuera de España.
En concreto, la magistrada indaga en si él y sus colaboradores más estrechos en esa entidad desviaron casi cuatro millones de euros a base de manipular contratos durante un lustro: desde la construcción de La Cartuja hasta la Supercopa celebrada en Arabia Saudí. Ante la magistrada, el exdirigente, tal y como ha explicado a la salida, ha negado cualquier irregularidad y sigue imputado por corrupción en los negocios y administración desleal.
“Soy el más interesado en que todo se aclare”, ha dicho Rubiales ensalzando su gestión al frente de la RFEF. “He tenido constantes ataques y querellas, esta es otra muestra más, pero lo que mantengo es que jamás ha habido ningún dinero que se reciba de manera irregular, ninguna licitación irregular, hemos obrado siempre con la máxima excelencia”, ha añadido al abandonar los juzgados.
El sumario del caso recoge varios informes de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil en los que los agentes reflejan la existencia de un “entorno societario conformado por altos cargos de…