El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido este domingo en Barna su política para desescalar el conflicto derivado del proceso independentista en Cataluña y ha aceptado que sus políticas son “arriesgadas”. “En una resolución política de primer nivel, hemos decidido salvar a Cataluña de la crispación para devolverla al marco que nunca debió desamparar, que es la convivencia”, ha considerado sobre su acercamiento a ERC. Sánchez, que ha participado en un acto del PSC con sus aspirantes a las elecciones municipales ante 2.500 personas, también ha anunciado que, a fines de año, en un paquete de ayudas del que ya han hablado varios de sus ministros, el Ejecutivo “incorporará mecanismos para contener la evolución de los costes de los alimentos”.
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