El procés “pertenece al pasado” y Pedro Sánchez no contempla en ningún caso conceder al independentismo catalán la que ha pasado a ser ahora su principal demanda: la celebración de un referéndum de autodeterminación, esta vez acordado con el Estado. Una consulta que la víspera le volvió a exigir el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. “Estos son debates pasados, en la Constitución no se reconoce el derecho a la independencia de ningún territorio. Podrán reclamar lo que quieran, pero desde luego no se va a producir. No cabe en la Constitución ni en ninguna Carta Magna de ningún país del mundo”, ha zanjado Sánchez este martes, en la tradicional comparecencia en La Moncloa para hacer balance del año. “¿Cuántas veces han dicho que se va a celebrar un referéndum de independencia en Cataluña He perdido la cuenta. En cambio, se celebraron dos referéndums y una declaración unilateral de independencia con el Gobierno del PP”, ha remarcado en un acto en el que la economía ha sido la gran protagonista.
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Sánchez cree que no habrá rebajas de penas para corruptos tras la reforma de la malversación
La Fiscalía Anticorrupción teme que los cambios en el Código Penal provoquen rebajas de penas a corruptos por malversación, pero Pedro Sánchez cree que estas no se producirán. El presidente del Gobierno ha asegurado la mañana de este martes que la reforma de este delito, aprobada junto a la derogación de la sedición, recoge “una disposición transitoria que garantiza que se mantengan las penas para los casos de desvío irregular presupuestario sin revisión a la baja de las condenas”. Una respuesta que no se ciñe exactamente al contenido del texto aprobado. Sánchez ha insistido ante varias preguntas sobre los posibles efectos inesperados de la malversación, que lo que la reforma hace es “homologarla con a las principales democracias europeas”. “No se despenaliza la malversación, se homologa con Europa”, ha reiterado, al tiempo que destacaba su importancia para resolver la crisis catalana. “Los conflictos políticos se tienen que sustanciar en el territorio político, no en los juzgados. Este Gobierno hace una apuesta decidida e inequívoca por el reencuentro y no volver a 2017”, ha justificado.
Sánchez ha defendido a su vez la redacción de la ley del solo sí es sí, pese a que desde su entrada en vigor en octubre su aplicación haya supuesto la rebaja de penas de un centenar de agresores sexuales. “Estamos hablando de una ley que es pionera y que introduce nuevas penas, un mayor elenco de circunstancias agravantes, que también recoge medidas de protección a las víctimas… Por tanto, lo que hace esta ley es reforzar la protección de las mujeres frente a cualquier tipo de agresión sexual. Ahora los tribunales tienen que, a través de la jurisprudencia, establecer la correcta aplicación de esta ley”, ha afirmado. El presidente ha subrayado que el Tribunal Supremo falló en el caso Arandina “que tiene que analizar caso por caso y no establecer rebajas automáticas de las penas, como estableció la Fiscalía General del Estado”. Y ha asegurado que esa es la visión que comparte el Gobierno.