El tiempo es oro en la operación para salvar Credit Suisse. Según ha informado el Financial Times este sábado, el Gobierno suizo está presto a permitir que UBS se salte ciertas reglas a fin de que la fusión entre las dos mayores entidades del país pueda hacerse realidad lo antes posible. En concreto, el Ejecutivo pondría en marcha medidas de emergencia para que UBS pudiese ignorar la obligación de dar un periodo de consulta de seis semanas a los accionistas.
Seguir leyendo