MADRID, 27 (CHANCE)
El programa comenzaba con Ion Aramendi aclarando que Gema Aldón tenía inconvenientes en el codo, que había recibido atención médica mas que su dolencia no era tal como para impedir que continuara en el concurso. Pese a ello, la hija de la cooperadora de T.V. decidía hacer su saco con sus posesiones para plantear su abandono. Esto afectaba de forma directa a Ana María Aldón, quien estaba en plató y se preocupaba por el estado de su hija.
El comunicador le recordaba a la superviviente que se le ha propuesto aplicar un tratamiento médico que ella ha rechazado por el temor que padece a las agujas y ella aseguraba que era tal el dolor que sufría, que superaba al dolor que vivió durante el parto de su hija. Tras la pausa promocional, Ana María Aldón se planteaba convencer a su hija para no abandonar y lo hacía con las mejores palabras que podía utilizar.
En cuanto la concursante escuchó a su madre, no pudo evitar emocionarse mientras que escuchaba su alegato. La que fuera mujer de José María Ortega le solicitaba perdón en público por las veces que no confió en ella reconociendo que “me has dejado al a altura del betún, eres lo más importante que tengo”. Le aseguraba que todo cuanto ha dejado fuera del programa está bien, que no se preocupara lo más mínimo, desvelando cómo están viviendo Nicole y el pequeño José María su concurso. “Tu hija te está aguardando para comerse los peces que pescas, a tu hermano todos los días le debo poner vídeos nuevos tuyos” relataba.
Antes de terminar la conexión, le recordaba que abandonar no era una alternativa si deseaba lograr su sueño y que no olvide que tiene que pelear por ella y por su hija. También le charló de su “papasito”, que tanto le quiere y le echa de menos. Madre e hija, llorando a la vez mas con miles y miles de quilómetros a distancia, se sintieron más cerca que nunca. Gema Aldón finalmente reflexionaba merced a Ana María Aldón y aceptaba continuar en el concurso.