WASHINGTON (Informa AP) – Hace nueve meses, el presidente Joe Biden firmó una amplia ley bipartidista de armas, la respuesta legislativa más significativa a la violencia armada en décadas.
“Se salvarán vidas”, dijo en la Casa Blanca.
La ley ya ha impedido que algunas personas potencialmente peligrosas posean armas. Sin embargo, desde su firma el verano pasado, el número de tiroteos masivos en Estados Unidos no ha hecho más que crecer. Cinco muertos en un club nocturno de Colorado. Once muertos en una sala de baile en California. Y esta misma semana, tres niños de 9 años y tres…
