¿Sería posible un default de Estados Unidos? No es un riesgo nuevo. En 2011, USA perdió la triple A de Standard & Poor’s (S&P), la principal agencia de calificación de riesgos, por un exceso de endeudamiento generado singularmente por los rescates a la banca. Entonces, ya se calificó de evento histórico, mas se eludió el default, por el que jamás ha atravesado todavía la economía americana, pese a que todavía mantiene el rating AA+, el escalón precedente a la máxima nota crediticia internacional.
Sin embargo, el flujo de caja de la Casa Blanca en dos mil veintitres vuelve a desvelar dificultades extremas. Aunque, esta vez, y en contraste a la coyuntura americana del comienzo de la década pasada, presenta una economía que coquetea con una recesión -tras haber salvado dos trimestres sucesivos de contracción, por el dinamismo que mantiene su mercado laboral- y con una inflación aún en cotas altas.
En este contexto se enmarca la iniciativa de la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, de reivindicar al legislativo otro balón de oxígeno; esto es, una ampliación del límite de endeudamiento del Tesoro. Este…