Había tantos pequeños queriéndose hacer una foto al paso de los Reyes Magos que si en vez de Gaspar hubiese sido Bad Bunny el teléfono móvil hubiera salido por los aires. Los tres reyes de Oriente recorrieron Madrid en una increíble cabalgata en la que participaron cientos y cientos de personas, entre ellos cuarenta pajes por cada rey. Después de tres años de parón debido a la pandemia, la magia tomó de nuevo las calles con una asistencia masiva.
Seguir leyendo