MADRID, diecinueve (EUROPA PRESS)
Podemos ha calificado de “muy mala señal” la admisión a trámite por la parte del Tribunal Constitucional (TC) del recurso del PP para inmovilizar la reforma que se tramita en las Cortes Generales para desbloquear su renovación, dado que “todo indica que el ala derecha” del organismo “tiene pretensión de proseguir con su golpe a la democracia parlamentaria”.
Así lo han indicado fuentes de la capacitación morada tras conocer que, aparte de evaluar el recurso contra las dos enmiendas que modifica el sistema de elección, rechaza asimismo las recusaciones de Unidas Podemos y Partido Socialista Obrero Español contra dos magistrados: el presidente del tribunal de garantías, Pedro González-Trevijano, y el magistrado Antonio Narváez.
Una decisión que, conforme fuentes jurídicas, se han adoptado por 6 votos (los de la mayoría conservadora) frente a cinco (los de la minoría progresista).
Desde Podemos han recalcado que si finalmente un TC “constitucionalmente caducado” se atreve “por primera vez en cuarenta años” de democracia se atreve a intervenir en el “proceso de producción de leyes del legislativo, se “estaría cruzando una línea roja de gravísimas consecuencias”.
Esta mañana la coportavoz de Podemos, Alejandra Jacinto, ha demandado al Constitucional que no actúe de forma “antidemocrática” y finalmente no suspenda cautelarmente la reforma. Sin embargo, ha desgranado que si por último resuelve en ese sentido, las Cortes Generales tienen razonamientos jurídicos suficientes para no atender esa paralización.
También ha denunciado que este conflicto revela un “golpe blando” a la democracia que podría perpetrar el “aparato de la derecha judicial”. Jacinto ha desgranado que se trata de una transgresión de la separación de poderes y cruzar una “línea roja” que conminaría las bases del sistema democrático.
“ES DE UNA GRAVEDAD INUSITADA”
En la misma línea se ha pronunciado el secretario general del PCE, Enrique Santiago, que ha censurado que los dos magistrados del TC hayan podido votar su propia recusación, un hecho que ha valorado de “totalmente nuevo” en la democracia española.
Según ha explicado en una entrevista este lunes en Radio Euskadi, recogida por Europa Press, tras conocer que el TC ha admitido el recurso del PP, este hecho “no está previsto en el orden de España sino que está previsto lo opuesto, abstenerse”.
También, ha insistido en que tampoco cabe un “recurso de amparo” en esta materia como el que ha interpuesto el PP porque este género de recurso es “para proteger un derecho fundamental”.
“Es decir, el PP para resguardar su supuesto derecho esencial vulnerado de la participación política de sus ciento y pico miembros del Congreso de los Diputados, sumando toda la derecha, pide al TC que suspenda el derecho de participación política de la mayoría parlamentaria. No tiene ni pies ni cabeza”, ha reclamado.
En otro punto, aunque no ha querido pronuciarse sobre si cree que el órgano de garantías impedirá que el Senado vote el sistema de elección del propio TC, sí ha remarcado que espera que “no se le ocurra vulnerar el artículo sesenta y seis de la Constitución” que establece la inviolabilidad de las Cortes Generales. “Solo Tejero impidió el funcionamiento del Congreso”, ha apostillado.
Por su lado, el portavoz de los comuns y diputado en el Congreso Joan Mena ha asegurado en un mensaje en la red social Twitter, que es un “mal día para ser demócrata” y que el presidente del TC, es como “Juan Palomo. Yo me lo guiso y yo me lo como”, en referencia al rechazo de la recusación interpuesta por UP y Partido Socialista Obrero Español.
Asimismo el presidente del conjunto parlamentario de Unidas Podemos en el Congreso, Jaume Asens, se ha expresado en exactamente la misma línea y ha reclamado que es un “fatídico día” para los demócratas.
A su juicio, el “golpe” del Tribunal Constitucional “contra el pueblo avanza” y la separación de poderes “recula”, ha publicado en Twitter.