El presidente ucranio, Volodímir Zelenski, puede presumir de una apabullante colección de apariciones en parlamentos a lo largo del ancho mundo desde el instante en que el veinticuatro de febrero comenzó la invasión rusa, pero hasta ahora jamás había hablado en persona ante ninguno de ellos. El Capitolio de E.U. lo recibió este miércoles por la noche para escucharlo —esta vez, no mediante una pantalla― en una sesión especial conjunta que se anunciaba como “histórica”. Y Zelenski recogió ese guante salpicando sus palabras de referencias a heroicos episodios del pasado: de la batalla de Saratoga, punto de inflexión de la Guerra de la Independencia estadounidense, a la oratoria del presidente Franklin Roosevelt, líder del país a lo largo de una gran parte de la Segunda Guerra Mundial, pasando por la “resistencia de los aliados frente a los nazis en la Navidad de 1944″. Todo ello condujo a Zelenski a una conclusión: la batalla que su Ejército está librando ya en el corazón de Europa es vital para el futuro de la democracia, y por eso sus tropas precisan más que nunca “toda la ayuda posible”, económica y militar. “Estamos en condiciones de mudar el curso de la guerra”, sentenció. “Su dinero no es caridad, es una inversión en la seguridad global que manejamos de la forma más responsable”.
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